martes, 22 de mayo de 2007

MANIFIESTO CASA ÁFRICA. ¡SUSCRÍBELO!

MANIFIESTO DE ORGANIZACIONES SOCIALES CANARIAS ANTE LA INAUGURACIÓN DE CASA ÁFRICA

Las organizaciones y asociaciones canarias que llevamos años trabajando para establecer lazos de solidaridad con el continente africano y preocupados por el presente y el destino de las relaciones Canarias-África y mucho más allá por el futuro mismo de ese continente

EXPRESAMOS LO SIGUIENTE

En primer lugar, el ente público Casa África, inaugurada en el día de hoy, puede constituirse en el epicentro de Canarias y del Estado español para avanzar hacia el desarrollo del conocimiento mutuo, el respeto, la cooperación al desarrollo, el intercambio cultural, formativo e informativo con nuestros vecinos africanos alejados de cualquier actitud colonial o paternalista. Pero también puede suceder lo contrario, que su orientación gire en torno a la misma política que arruina a nuestros vecinos provocando entre otros males el fenómeno migratorio. Nos referimos a esa forma de capitalismo salvaje que se ha dado en llamar neoliberalismo, utilizando Casa África como rampa de lanzamiento destinada a la internacionalización africana del capital europeo, norteamericano, español y canario, en colaboración con algunas autoridades africanas , dándole apariencia de cooperación al desarrollo y así obtener consenso social.

En segundo lugar, el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación ha manifestado lo siguiente: “la Casa África nace con la finalidad de dar una respuesta solidaria española a los problemas de África y potenciar las relaciones hispano-africanas en momentos especialmente difíciles, pero también con la vocación de constituirse en un foro global para intensificar el conocimiento y el aprecio mutuos entre las respectivas sociedades civiles”. Sin embargo, el único convenio de calado firmado hasta ahora por Casa África ha sido con la Cámara de Comercio de Las Palmas; su presidente lo definió así: “Casa África se compromete a promocionar aquellos servicios de la Cámara que puedan ser de interés general para las empresas vinculadas o interesadas en establecer relaciones económicas (…) Tenemos especial interés en colaborar en las actuaciones de carácter económico y empresarial que pueda desarrollar Casa África”.

Por tanto, nada que ver con una política de cooperación al desarrollo. No es válido usar esta institución recién nacida para justificar un proyecto que obedece a intereses privados muy alejados de la solidaridad y la lucha contra la pobreza. En la práctica, significa otorgarle protagonismo como actor de la cooperación a las empresas, confirmándose para Casa África la orientación del Plan Director (2001-2004) de la época anterior, que tenía una orientación claramente comercial y apelaba a la “racionalidad económica”. Si la Cámara de Comercio Canaria en alianza con la Cámara de Comercio norteamericana quiere internacionalizar la economía canaria, que no sea a costa de los fondos de cooperación y sin subordinar Casa África, ni directa ni indirectamente al desarrollo de tales planes. Casa África puede terminar en una nueva frustración para africanos y canarios si se inscribe como parte del expolio internacional de nuestros vecinos en lugar de tomar la senda de la solidaridad que tanto necesitamos. Quien pretenda conciliar estos dos caminos, el de la solidaridad y el de los negocios privados, simplemente se pondrá al servicio del dinero que sangrará a los africanos. No hay enjuague posible.

Por un ente público “Casa África” que nos sitúe en un lugar de referencia internacional en el entendimiento, la cooperación, el conocimiento mutuo y la solidaridad, en la que tengan cabida los africanos asentados en el archipiélago canario.

Las Palmas de Gran Canaria a 12 de Junio de 2007

Firmado por las siguientes entidades y ciudadanos:

ENVIAR NOMBRE COMPLETO DE LA ORGANIZACIÓN O PERSONA AL CORREO:
nocazadeafrica@gmail.com

lunes, 21 de mayo de 2007

Entre cayucos e inversiones

Iolanda Fresnillo
La imagen de las pateras y cayucos llegando a las costas canarias y andaluzas se suceden desde hace demasiado tiempo. La mal-llamada “crisis de los cayucos” ha llenado páginas de diarios y minutos de radios y televisión, sobre todo desde la primavera y verano de 2006, con la llegada, dicen que masiva, de inmigrantes provenientes de África Sur-Sahariana a las Islas Canarias. Ante la alerta mediática, el gobierno español respondió con el Plan África, un plan de acción de 3 años que permita “establecer un nuevo marco, más profundo y global, de relaciones con África Subsahariana, que permita a España estar a la altura de los importantes retos y oportunidades que plantea el continente”. El Plan África incluye una serie de medidas heterogéneas y dispersas con las que el gobierno español quiere afrontar los retos políticos, de seguridad, culturales, económicos, ambientales, migratorios y de desarrollo del África Sur-Sahariana. Este Plan ha sido ampliamente criticado por diferentes sectores de la sociedad española, que ven en él una simple continuación de los principios que han guiado las relaciones entre España y el continente Africano las últimas décadas: el servilismo hacia a los intereses económicos y de estabilidad social del Estado español.
Con este artículo queremos abordar una de las causas del fenómeno migratorio desde el África Sur-sahariana en Europa, como es el proceso de sobre-endeudamiento de los países africanos, y analizar hasta qué punto el Plan África hace frente a las causas de los problemas que dice afrontar.

domingo, 20 de mayo de 2007

La importancia de Antonio Gramsci, a 70 años de su muerte

Rossana Rossanda
Hace setenta años moría en una clínica Antonio Gramsci. Al funeral no fue nadie, salvo la cuñada, Tatiana, y la policía. Había sido detenido en 1926 y había recobrado la libertad unas pocas semanas antes, extenuado por la enfermedad y no sólo por ella.
Si para morir se precisa de cierto consentimiento, el suyo debió verse propiciado por la percepción de que no era ya querido en parte alguna: no en Moscú, en dónde se encontraban la mujer, los hijos y los compañeros; no en Ghilarza, en donde se hallaba su familia de origen. De esto, nada dijo a la afectuosa no amada Tatiana, y si se lo confió a Piero Sraffa, Piero Sraffa no nos dejó constancia testimonial.
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Oda al humanismo

Emir Sader
Ahora que el Papa se ha ido, es un buen momento para preguntarnos de nuevo qué significa ser religioso. Cuando alguien nos dirige la pregunta, desde el punto de vista de alguna religión -¿Crees en Dios?- y respondemos que no, automáticamente buscan caracterizarnos como “ateos”, con una connotación negativa, como la del que “no cree”, la del “no creyente”; una ausencia, casi un defecto, una carencia. Oponiendo el religioso al “descreído”. Casi nos miran con pena, con lástima, con piedad, como si miraran a alguien condenado al pecado, al limbo, como a alguien que Dios no conociera –los dioses-, que dudase de su incuestionable existencia, alguien incapaz de conocer y disfrutar de la fe, incapaz de tener fe –por lo que se puede deducir: un infiel.

La abstención, protagonista de la jornada electoral en Argelia

Elena Beloki
Gara
«Con la abstención, la población argelina ha exigido la necesidad de cambio real de sus condiciones de vida. ¿Pero, cuándo será escuchada?», se pregunta la periodista Elena Beloki a la hora de analizar las elecciones del jueves en Argelia. Sólo el 35,51% de los argelinos participó en el escrutinio legislativo del jueves en Argelia. Esta tasa de participación manifiesta el escaso interés de la ciudadanía por la Asamblea Nacional y dibuja la fractura existente entre los dirigentes y la población argelina.

El Foro Social Mundial, en la encrucijada

Walden Bello

Con la inauguración del Foro Social Mundial (FSM) en Porto Alegre, Brasil, en enero de 2001, se alcanzó una nueva etapa en la evolución del movimiento por la justicia global.
El FSM fue el proyecto original de movimientos sociales con cierta asociación con el Partido de los Trabajadores (PT) en Brasil. El movimiento ATTAC en Francia dio fuerte apoyo a la idea en las primeras etapas; algunas de sus personalidades clave estaban conectadas con el periódico Le Monde Diplomatique.

Los servicios públicos en Europa: de la privatización a la participación

Eurotopia No. 4
May 2007
En toda Europa se está viviendo un intenso conflicto sobre el futuro de los servicios públicos. Por un lado, están aquellos que opinan que la privatización y la liberalización son instrumentos indispensables para cubrir las necesidades de los consumidores, mejorar la eficiencia de las finanzaspúblicas y crear un mercado europeo común que permita la libre circulación de empresas, profesionales y trabajadores. Por el otro, están los que hacen hincapié en el riesgo que entraña privatizar servicios históricamente garantizados y protegidos por el Estado, despojando así a la población de un control democrático sobre la forma en que se gastan sus impuestos.
Contenido:
Europa, S.A.
El fracaso de las privatizaciones en Gran Bretaña
Asociaciones público-privadas en Europa
Alternativas para la reforma del sector público en Europa
Regreso al futuro Europa unida en defensa de los servicios públicos
La revuelta contra la privatización de la sanidad
Descargar Eurotopia No. 4

lunes, 14 de mayo de 2007

FRENTE A LA CASA ÁFRICA, ¿QUÉ PLANTEAMOS LAS ORGANIZACIONES SOCIALES?

El próximo 12 de junio es la inauguración oficial del consorcio Casa África en Las Palmas de Gran Canaria. Las asociaciones y otros colectivos y personas preocupados por el rumbo que esta institución pueda tener, nos convocaremos con el objeto de procurar una postura común frenta a la puesta en marcha de esta institución y el rumbo que, parece ser, puede estar tomando.
Se han elaborado dos propuestas de manifiesto que debatiremos este jueves 17 de mayo. A continuación de esta información verán los dos propuestas (Propuesta A y Propuesta B). Están todas y todos cordialmente invitados a que envíen sus comentarios al respecto para así enriquecer el debate que convocamos, y ahí nos vemos...
La cita es en el Patio de Las Culturas, el Jueves 17 de mayo a las 20:00 h

PROPUESTA MANIFIESTO -A-

LA CASA ÁFRICA QUE QUEREMOS
Reunidos en Las Palmas de Gran Canaria a …/… las asociaciones y particulares abajo firmantes
SALUDAMOS la inauguración de Casa África en Canarias y particularmente en nuestra ciudad y lo consideramos un privilegio y una alta responsabilidad. Con ello anticipamos nuestro deseo de contribuir con nuestro esfuerzo y apoyo al éxito de un proyecto que, como no puede ni debe ser de otra forma, está obligado a darse un fuerte contenido educativo, formativo, cultural, de cooperación y solidaridad entre ambas sociedades civiles, las africanas y la canaria.
Nuestra situación geográfica nos convierte en un territorio extremadamente sensible porque somos al mismo tiempo un enclave europeo y un archipiélago africano. Desde este sentido de pertenencia y de auténtica vecindad orientamos nuestro apoyo a esta Casa África que abre hoy sus puertas. Porque nuestra situación geográfica, no nos engañemos, es también y sobre todo una situación geoestratégica y mucho nos tememos -dado el bajo perfil que hasta hoy está teniendo este proyecto en sus aspectos culturales, de convivencia, formativos y de cooperación y, por contra, su exceso de vocabulario comercial: convenio firmado por la Casa África con la Cámara de Comercio de Las Palmas así como el rápido y celebrado aterrizaje en el archipiélago de la Cámara de Comercio de EE.UU., auténtico Mr. Marshall redivivo- que de momento asistimos a un intento de internacionalización, desde territorio canario, no sólo del capital estadounidense, europeo y español, sino de la propia economía especulativa canaria, ya se sabe, ahí donde se acaba un territorio insular bienvenido sea un continente, y a una nueva oferta de nuestra burguesía local al capital financiero internacional a añadir a su ya amplio historial de servicios como agente de negocios de la alta burguesía occidental.
La asociaciones y particulares abajo firmantes no daremos un cheque en blanco a los dirigentes de Casa África, pero colaboraremos para que sea un orgullo para canarios y canarias, para que Casa África sitúe a Canarias en un lugar de referencia internacional de entendimiento, cooperación, conocimiento mutuo y solidaridad.
No queremos ser plataforma de explotación, saqueo y vergüenza. Apoyaremos una Casa África del conocimiento, la cooperación, la solidaridad y las relaciones comerciales dignas y con criterios de igualdad entre las partes, pero seremos combativos e insobornables a la hora de evitar que, una vez más, el nombre de Canarias se añada a la larga lista de la infamia de los saqueadores del continente negro.
África es mucho más que la patología que permanentemente segregan nuestros medios de comunicación y los organismos oficiales y multinacionales de toda índole, en lo que no es sino una falsedad que pretende perpetuar ante nuestro ojos la imagen de África como el continente de la eterna minoría de edad, el continente para siempre asistido.
África es mucho más que hambre, conflictos, pandemias, desescolarización y falta de alternativas; la sociedad civil africana es activa, lucha y mira al futuro con esperanza africana, es poseedora de una larga historia y de un riquísimo bagaje cultural que cubre todos los ámbitos de la convivencia. África es en este sentido una reserva de valores de la que debemos aprender y es tarea de Casa África hacer todo lo que esté en su mano para ofrecer a la sociedad civil canaria y por extensión a toda la sociedad civil española un conocimiento del que andamos más que escasos y que, aunque lo ignoremos, es fundamental para nuestro futuro como canarios, como europeos y como humanidad.
No nos oponemos a la inversión extranjera en África, ni mucho menos al desarrollo de la inversión canaria y la internacionalización de nuestra economía, pero francamente creemos que no es ésta la tarea primordial de una institución como Casa África, que existen otras vías para el desarrollo de la actividad comercial que han de ser bien delimitadas y ajenas a todo lo que tenga que ver con cooperación y solidaridad, y que toda inversión ha de hacerse contando con la opinión y el apoyo explícito de los destinatarios que no serían sólo los gobiernos de los países africanos sino, prioritariamente, la sociedad civil de los mismos y sus necesidades más acuciantes.
África es un continente de profundas raíces comunitarias y son muchas las asociaciones que trabajan, día a día, por un futuro mejor para el continente y para el planeta. No vemos que Casa África esté orientando su actividad hacia el impulso de todos esos movimientos que buscan hoy la auténtica emancipación, la verdadera independencia, hasta hoy frustrada y tantas veces postergada, de todo un continente.
Casa África debe trabajar con ahínco en el intento de acabar de una vez por todas con el drama que hoy supone la emigración africana hacia Europa. África es también, demográficamente, el continente más joven y Casa África no sólo no debe contribuir, de ninguna de las maneras posibles, al levantamiento de muros y al incremento de las terribles dificultades que afrontan hoy los jóvenes africanos en su búsqueda de un futuro para ellos y los suyos, sino que debe implicarse en la dignificación de estos auténticos héroes del África contemporánea sin los que África se consumiría en silencio.
Casa África debe trabajar en desterrar la criminalización del emigrante y dignificar así tanto a los que llegan como a los que viven entre nosotros. Son trabajadores, no delincuentes.
En definitiva, Casa África tiene que ser la Casa de los africanos, generosa y abierta a todo lo que nos llegue del continente vecino, de nuestro continente y, al mismo tiempo, ha de ser receptiva a las sugerencias que, desde la sociedad civil canaria, podemos hacerle todos aquellos y aquellas que, de una forma u otra, llevamos años trabajando en un modelo de relaciones solidarias Canarias-África.

PROPUESTA MANIFIESTO -B-

¿Qué Casa de África?
Algunas organizaciones sociales canarias llevan años trabajando para establecer lazos de solidaridad con África, basados en un esfuerzo para alcanzar el conocimiento mutuo, el respeto, la cooperación al desarrollo, el intercambio cultural, formativo e informativo, alejados de cualquier actitud neocolonial o paternalista. Casa África, por fin inaugurada hoy, puede constituirse en el epicentro canario para avanzar hacia el desarrollo de los objetivos señalados, pero también pudiera suceder lo contrario: que su orientación gire en torno a la misma política que arruina a nuestros vecinos, provocando entre otros males el fenómeno migratorio. Nos referimos a esa forma de capitalismo salvaje que se ha dado en llamar neoliberalismo. Se trataría de manejar Casa África como rampa de lanzamiento destinada a la internacionalización africana del capital (europeo, estadounidense, español y canario), en colaboración con algunas autoridades africanas, dándole una apariencia de cooperación al desarrollo a esta forma de rapiña para así obtener cierto consenso social.
Un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores, publicado el 23 de junio de 2006, decía lo siguiente: "La Casa África nace con la finalidad de dar una respuesta solidaria española a los problemas de África y potenciar las relaciones hispano-africanas en momentos especialmente difíciles, pero también con la vocación de constituirse en un foro global para intensificar el conocimiento y el aprecio mutuos entre las respectivas sociedades civiles." Sin embargo, el único convenio de calado firmado hasta ahora por Casa África ha sido con la Cámara de Comercio de Las Palmas. Su presidente lo definió así: "Casa África se compromete a promocionar aquellos servicios de la Cámara que puedan ser de interés general para las empresas vinculadas o interesadas en establecer relaciones económicas (...). Tenemos especial interés en colaborar en las actuaciones de carácter económico y empresarial que pueda desarrollar Casa África".
Nada que ver con una política de cooperación al desarrollo. No vale usar esta institución recién nacida para justificar un proyecto que obedece a intereses privados muy alejados de la solidaridad y la lucha contra la pobreza. En la práctica, significa otorgarle protagonismo como actor de la cooperación a la patronal. Se confirma para Casa África la orientación del Plan Director (2001-2004) de la época de Aznar, que tenía una orientación claramente comercial y apelaba a la "racionalidad económica". Si las empresas quieren invertir, allá ellas, pero no a costa de unos fondos escasos y una Casa África que al parecer pretenden poner al servicio de los planes empresariales y cubrir los riesgos que tales inversiones puedan representar. Si el gobierno canario quiere internacionalizar la economía, allá él, pero que no subordine Casa África, ni directa ni indirectamente, al desarrollo de tales planes. Casa África puede terminar en una nueva frustración para africanos y canarios si se inscribe como parte del expolio internacional de nuestros vecinos en lugar de tomar la senda de la solidaridad que tanto necesitamos. Quien pretenda conciliar estos dos caminos, el de la solidaridad y el de los negocios privados, simplemente se pondrá al servicio del dinero que sangrará a los africanos. En definitiva, Casa África tiene que ser la Casa de los Africanos, generosa y abierta a todo lo que no llegue del continente vecino, de nuestro continente. No hay enjuague posible.

martes, 8 de mayo de 2007

Sobre populismos

Francisco Fernández Buey
El País
Hoy en día, en los principales medios de comunicación occidentales, se llama populismo a movimientos, gobiernos o regímenes muy diferentes y a veces de signo radicalmente contrario. Esto está creando mucha confusión, pues existe la tendencia a meter en ese mismo saco del populismo procesos y tendencias que son muy distintos por su orientación, por los objetivos explícitamente declarados y por la actuación en la práctica de los sujetos de referencia. Desde el punto de vista de la historia de las ideas políticas, resulta llamativo que al hablar o escribir hoy en día sobre populismo casi nadie se acuerde del primer movimiento socio-político que está en la base del uso del término populismo en Europa. Vale la pena recordarlo. En Europa, el término populismo se usó históricamente para calificar a los narodnik rusos de la segunda mitad del siglo XIX. ¿Por qué un olvido tan generalizado? La reflexión a partir de esta pregunta arrojaría mucha luz acerca de la confusión actual sobre el uso del término populismo, que casi siempre aparece ahora en una acepción peyorativa.

lunes, 7 de mayo de 2007

Estado actual de la globalización. Algunos apuntes para el debate / II

José Villalba Pérez
- Rusia, vuelve a la escena política global tras la implosión de la URSS y del periodo Yeltsin. La llegada de Putin al poder a fines de 1999 significa la paulatina reconstrucción del poder del Estado Ruso. Tras la derrota de los Oligarcas, ha reafirmado implacablemente el control del Kremlin sobre el sector energético y los medios y, con ello, la subordinación de los principales sectores económicos a un proyecto de reconstrucción de la Gran Rusia. En esa línea mediante una ley de 2006, Gazprom obtiene el monopolio de la red de gasoductos destinados a la exportación, al mismo tiempo que el consorcio del gas ruso trata de hacerse con activos en las redes de aprovisionamiento energético de la Unión Europea. Además, el Kremlin ha dejado bien claro a las compañías extranjeras energéticas que, fuera cual fuere la ley cuando se establecieron en Rusia, en adelante sólo podrán trabajar si se asocian a una compañía estatal. Gracias a los precios del petróleo, Putin a logrado el reflotamiento económico de una Rusia que Yeltsin había puesto en venta a precio de saldo, logrando un crecimiento promedio de 6,8% y una inflación controlada. Todo ello en un marco de capitalismo salvaje que ha provocado la extrema dualización de la sociedad rusa. Pero sobre todo, Putin ha conseguido restablecer la influencia global de Rusia.